28 de febrero de 2011

Grito de Asencio

Matasello Primer Día de Emisión

Diseño: Nelson Romero

El 28 de febrero se conmemoran dos siglos del ˜Grito de Asencio˜, inicio de la rebelión contra los realistas en la Banda Oriental.

El 28 de febrero de 1811, instigados por José Artigas desde Entre Ríos, un grupo de orientales se alzó contra los realistas en la localidad de Mercedes a orillas del arroyo Asencio, en lo que fue la primera voz revolucionaria de que se tuvo noticia en el país. ˜Día memorable que había señalado la Providencia para sellar los primeros pasos de la libertad en este territorio, y día que no podrá recordarse sin emoción, cualquiera que sea nuestra suerte˜, escribió el propio Artigas.

El ˜grito de Asencio˜ fue un triunfo de los orientales en armas dirigidos por Venancio Benavídez y Pedro Viera, que se rebelaron ante el poder de España radicado en la ciudad amurallada de Montevideo. Ese día los sublevados tomaron la villa de Mercedes y Santo Domingo de Soriano para apoyar el pronunciamiento de la Junta de Buenos Aires, en lo que se llamó luego ˜la admirable alarma˜.

La crisis política en España por la invasión napoleónica de 1808 había debilitado el poder de este imperio en América. Hacia 1810 la instalación del Consejo de Regencia en la península agravó los conflictos en la región del Plata. En la capital del virreinato del Río de la Plata, Buenos Aires, el virrey perdió apoyo militar, de comerciantes, letrados, sacerdotes y propietarios importantes de la ciudad Estos cuestionan la autoridad del nuevo gobierno en España, cesan al virrey Cisneros y establecen una Junta. En junio de 1810, se solicita el reconocimiento de la Junta al Cabildo Abierto de Montevideo, quien la rechaza y jura fidelidad al Consejo de Regencia. Esta actitud de Montevideo se explica por el predominio en la ciudad de militares y marineros españoles, y por la rivalidad comercial y portuaria con Buenos Aires.

Mientras en la campaña oriental, los pueblos que se encontraban bajo la jurisdicción montevideana acataron la resolución de la ciudad; los de la jurisdicción bonaerense apoyaron la junta revolucionaria, pero fueron presionados por el gobierno de Montevideo para no reconocerla oficialmente.

En enero de 1811 Elío llega a Montevideo desde España con el título de Virrey, e inicia los preparativos para declarar la guerra a Buenos Aires, lo que hará el 12 de febrero. Para ello tomó una serie de medidas fiscales que le permitan hacerse de recursos: regularización de títulos de propiedad de tierras para el pago de la contribución, solicitud de donativos patrióticos, impuestos a las importaciones de cuero, tabaco, control del contrabando permitiendo el comercio sólo a buques autorizados y a través de intermediarios nacionales.

Estas medidas perjudicaban a hacendados, comerciantes, barraqueros y navieros en su actividad mercantil que venía decayendo por la situación de crisis y el control español del comercio, ya que impedía el comercio con los ingleses. A estas medidas fiscales se suman los empréstitos forzosos al clero, empleados, propietarios, artesanos, hacendados, comerciantes, y el uso de la fuerza para coaccionar a los pueblos a reconocer la autoridad de Montevideo.

En consecuencia, algunos jefes militares al servicio del gobierno español, pero con gran asidero en la campaña oriental, se pasan al bando revolucionario, como es el caso de Artigas el 15 de febrero de 1811, quien abandona las fuerzas españolas de Colonia y solicita auxilios al gobierno de Buenos Aires para los levantamientos en la campaña.

Es en este clima de disconformidad y resistencia a lo que consideraban opresión por parte del gobierno españolista en Montevideo, que se genera el levantamiento armado de Asencio, comienzo de la revolución oriental.

(Del sitio web del Correo Uruguayo)



En 1961, con motivo del Sesquicentenario de este hecho histórico,
el Correo Uruguayo emitió una serie de dos valores
que reproducen el óleo de Carlos María Herrera titulado La mañana de Asencio.

 
 
Carlos María Herrera, La mañana de Asencioóleo sobre tela, 310 x 374 cm, 1914,
Museo Nacional de Bellas Artes

No hay comentarios:

Publicar un comentario